En 2019, de un total de 155.269 pilotos de aerolíneas encuestados, solo 8.674 (5,59%) eran mujeres. Y la mayoría de ellos trabajan en aerolíneas indias. 

La brecha de género al volante ha sido un tema candente de debate en los últimos años y todas las grandes compañías aéreas están tomando medidas para acabar con ella, por lo que la profesión de piloto de avión es ahora más atractiva que nunca para las mujeres. 

El futuro ve cada vez más comandantes femeninas en la cabina: es un cambio que debe empezar por las ambiciones que las mujeres han alimentado desde la infancia y que debe contar con el apoyo de la sociedad. La formación es la base para ello, desde la escolarización obligatoria hasta la formación específica para ser piloto de avión: sólo con una buena educación podemos esperar que haya más mujeres piloto al mando.

Pero veamos los primeros y más importantes hitos que el sector de la aviación ha logrado en los últimos años

Air France contrata a su primera mujer consejera delegada 

En diciembre de 2018, Air France nombró a Anne Rigail nueva consejera delegada, la primera mujer en los 85 años de historia de la compañía en asumir este prestigioso cargo. Antes de su nombramiento, Rigail ya era Vicepresidente Ejecutivo de Air France. Rigail es considerada una fuerza a tener en cuenta: su predecesor, Benjamin Smith, la describió como una«poderosa profesional del sector«.

India es el país con más mujeres piloto

Como mencionábamos al principio de este artículo, el país con mayor número de mujeres al mando es la India. Y es una aerolínea india la que tiene el mayor número de mujeres al mando: Alliance Air, una regional de Air India, con un 13,9%.

En segundo lugar se sitúa otra empresa india: la de bajo coste IndiGo, con un 13,87% de mujeres a la cabeza. En tercer lugar se sitúa la australiana Network Aviation, con un 13,86%. 

En el resto de los diez primeros puestos figuran SpiceJet (13,2%), la canadiense Porter Airlines (12,73%) y otra compañía india, Air India (12,4%). En séptimo y octavo lugar se sitúan Jet Airways (12,4%) y South African Express (12,14%), seguidas de Qantas Link (una regional de la compañía australiana Qantas), con un 11,6%. La única europea entre las diez primeras ocupa el décimo lugar: es la islandesa Icelandair, con un 10,9% de capitanas.

Iniciativa Nancy Bird Walton

A finales de 2017, Qantas anunció el lanzamiento de una nueva iniciativa que lleva el nombre de Nancy Bird Walton, pionera de la aviación australiana y fundadora y patrona de laAsociación de Mujeres Pilotos de Australia. El objetivo era comprometerse a contratar a más mujeres cualificadas como pilotos: la empresa quería alcanzar la cuota rosa del 20% en poco tiempo, pero como en 2017 solo tenía el 5%, se puede decir que está intentando con bastante ahínco acabar con la brecha de género.

Los Chix Fixes compiten por el espacio

Las«Chix Fix » son un grupo de mujeres técnicas de aviación de todo Estados Unidos. Se formaron en 2018 para participar como el primer equipo femenino en la competición por un puesto en mantenimiento aeroespacial. Su esperanza es concienciar de que el mantenimiento de aeronaves es una carrera que pueden seguir personas de todos los sexos.

Brecha de género y Covid: la situación en Italia

Tras un año pandémico, a principios de 2021, la clasificación elaborada por el Foro Económico Mundial, que registra la Brecha de Género en el mundo, vio el salto registrado por Italia, que ganó 13 posiciones, subiendo del puesto 76 al 63 de un panel de 156 países.

En el mundo de la aviación civil, este cambio todavía se deja sentir poco en nuestro país. Y pensar que han pasado casi sesenta años desde que Fiorenza de Bernardi entró en la historia de Italia como la primera mujer piloto de avión. Fue la primera aviadora italiana y la cuarta mujer piloto del mundo. Fiorenza se embarcó en su carrera de piloto a finales de la década de 1960, superando la desconfianza de la industria y ganándose el respeto de sus colegas.

La aviación civil necesita cada vez más mujeres en puestos de responsabilidad y mando: aún quedan muchos pasos por dar, pero parece que el debate sobre la brecha de género está conduciendo por fin a cambios concretos.