Actitudes peligrosas para los pilotos

La mayoría de los pilotos siempre han – lo diremos sin pelos en la lenguaun toque de arrogancia e ingeniopero hay actitudes que pueden ser peligrosas: el comportamiento antiautoritario, la impulsividad, la idea de ser invulnerable, el egocentrismo y la resignación pueden resultar contraproducentes y a veces incluso peligrosos cuando se conduce un avión.

 

Comportamiento antiautoritario del piloto

 

Al conductor al que no le gusta que le digan lo que tiene que hacer o cómo hacerlo puede tener una actitud antiautoritaria: las personalidades que no aceptan la autoridad tienden a descartar las normas por considerarlas poco importantes o no aplicables a ellos. Y como gran parte del sector de la aviación está regulado, este tipo de piloto no suele llegar muy lejos sin que alguien se dé cuenta y corrija su comportamiento

Hay casos excepcionales en los que saltarse las normas puede ser lo correcto, pero en general, las normas son fundamentales para volar con seguridad.

 

Impulsividad

 

Muchos pilotos son impulsivos: la carrera de piloto atrae a personas a las que les gusta ser atrevidas, pero en un avión tomar decisiones sin pensar puede ser perjudicial, incluso fatal. Aunque habrá situaciones en las que un conductor tenga que tomar una decisión rápidamente, sigue siendo aconsejable acordarse de sopesar y calcular bien una elección en lugar de tener una reacción instintiva.

El conductor impulsivo hace lo primero que se le pasa por la cabeza, sin considerar otras opciones, pero en el contexto de una tripulación un conductor siempre debe acordarse de consultar a los demás miembros del equipo antes de tomar una decisión difícil.

 

Creerse invulnerable

 

Hay pilotos que se creen «invulnerables» y, aunque son conscientes de los riesgos, nunca piensan realmente en los peligros.

Suelen ser personalidades incapaces de evaluar realmente los riesgos y propensas a sobrepasar sus límites personales y los de los demás. Además, los pilotos que se sienten a prueba de balas pueden incluso ignorar los protocolos de seguridad, poniéndose en situaciones peligrosas incluso cuando pueden evitarlo.

Egocentrismo

 

Al conductor egocéntrico le gusta presumir y a veces asume riesgos innecesarios para hacerse notar. Quiere demostrar sus habilidades, así que se esfuerza más allá de sus posibilidades y de las normas.

Un conductor que muestre una personalidad egocéntrica debe procurar no competir con los demás y darse cuenta de que asumir riesgos suele ser también una buena forma de ponerse en evidencia a sí mismo.

Consulte

 

La resignación puede ser una de las actitudes más peligrosas: nadie quiere estar en un avión con un piloto que, a la primera señal de problemas, levanta los brazos y se resigna a la suerte.

Los pilotos que tienen una actitud de resignación se rinden fácilmente. A menudo piensan que no pueden hacer nada para cambiar su situación, así que ¿para qué molestarse en intentarlo? Esto, por supuesto, está lejos de la verdad, y un piloto debería, por razones que son bastante obvias, no ceder ante los problemas e intentar mantener la lucidez para afrontarlos.

Lo que hemos enumerado hasta ahora pueden parecer actitudes poco realistas, pero en realidad suele ser la formación la que hace aflorar estas personalidades: la tarea de un buen profesor es también identificar a través de la experiencia los temperamentos más difíciles y reconducirlos hacia el mejor comportamiento. Y tú, ¿has pensado alguna vez qué tipo de piloto te gustaría ser?